MAYEUTICA o CONVENCER PREGUNTANDO
Reflexionando, a raíz del taller de este fin de semana y de la riquísima conversación con Elena Casado, sobre las dificultades de enseñar y convencer, me venía a la mente el “Protágoras”. La mayéutica era el método que utilizaba Sócrates para conducir a sus discípulos al conocimiento. Al contrario que en la instrucción, en la que el “experto” enseña al alumno un conocimiento cerrado, Sócrates parte de la idea de que cualquier persona puede alcanzar por si misma la verdad si se le orienta por medio de preguntas. Sócrates se consideraba a sí mismo una partera puesto que su tarea como maestro era conducir a sus alumnos a la luz. Si el discípulo alcanza por su propio razonamiento la convicción de que sus ideas previas son erróneas, se produce un momento de confusión e incomodidad que es la motivación necesaria para el aprendizaje (igual que son necesarias las contracciones del parto). Así, la primera tarea es liberar la mente de prejuicios para que pueda preguntarse acerca del